‘Internet of Things’ (Internet de las Cosas en español) es de donde provienen las siglas IoT, tan de moda en el entorno digital. Visto así, ‘internet de las cosas’ no aclara qué significa esto realmente y por qué es un término tan utilizado. En este artículo explicaremos el porqué de su importancia.
Para introducirnos en IoT es importante saber que se refiere a la conexión de dispositivos y objetos a través de una red pudiendo así interaccionar entre ellos. Es conocido a día de hoy por la gran cantidad de instrumentos cotidianos que se conectan a otros para hacer posible una comunicación entre personas y elementos, como un aparato de cocina que se conecta a un teléfono móvil, por ejemplo. Es decir, gracias al IoT podemos vincular prácticamente cualquier elemento sin necesidad de intervención humana, simplemente consiguiendo una interacción de máquina a máquina.
El Internet de las Cosas está planteado como una mejora de la eficiencia de los servicios y productos, pero en muchas ocasiones no se tiene en cuenta la seguridad de los datos o la privacidad de las personas, por lo que el IoT se convierte en un reto para el sector legal. Aparece con esto un nuevo desafío para los abogados, que entre sus casos aparecerá cada vez un mayor número de problemas y escenarios diferentes a los comunes originados por esta nueva aplicación de los dispositivos.
Como término relacionado con el ya citado aparece ‘Smart Cities’, del cual ya hemos hablado en nuestro blog y que también se ha convertido, por la importancia que tiene para la población, en uno de los temas estudiados en el plan de estudios de nuestro máster.
Esta avanzada tecnología se está introduciendo cada vez en más ámbitos, donde se incluye también el sector legal, no solo para solucionar problemas sino también para mejorar servicios. Si quieres conocer más aplicaciones del IoT no te pierdas nuestro Máster en Derecho Digital, Innovación y Tecnologías Emergentes del ICAM. Aún quedan plazas para las clases, que darán comienzo en octubre. Más información haciendo clic aquí.
